Tercer Campeonato, 2002-2003
Todo lo malo de ese paso tan desastroso inicial, se superó a base de esfuerzo que culminó el inolvidable 27 de Enero del 2003.
El cuadro verde tuvo que pasar las de Caín, levantarse de una pésima primera vuelta, en la cual terminaron en último lugar, apurar el paso en la segunda mitad y calificar rasgando las paredes con las uñas, justo el último día del rol regular.
Luego, vino la serie de "repesca" en donde ante Hermosillo jugaron excelente pelota, no dieron tregua a la fuerte escuadra sonorense y en cinco juegos los pusieron a descansar hasta las otras pizcas. En la semifinal se vieron las caras frente a unos Venados de Mazatlán que bien pudieron das más guerra si hubieran sabido aprovechar las oportunidades.
Los Cañeros le sacaron todo el jugo a sus fortalezas, sobre todo en esa serie semifinal contra Mazatlán.
En el sexto y decisivo partido, el manager de los porteños, Dan Firova, se jugó la mejor apuesta que tenía. Francisco "Pancho" Campos era el pitcher indicado para ese juego clave pero humano al fin y al cabo, no pudo tener eficacia en los momentos clave (en la séptima permitiendo jonrones de Saúl Soto y Octavio Ojeda) y ahí se escapó el último chance de los Venados.
Jason Bass nuevamente se alzó como el gran hombre de la ofensiva verde y su cuadrangular de la sexta entrada creemos que empezó a marcar el camino y fue la inspiración para lo que vino después, incluyendo el segundo vuelacercas del moreno ante el zurdo José Luis García que fue la cereza en el pastel.
Mochis hizo lo necesario para obtener su cuarto triunfo y pasar así a la Serie Final, con todos los méritos habidos y por haber y además, proyectado por algunos ya como gran favorito, sea quien sea el rival.
La serie final de la Liga Mexicana del Pacífico se vistió del color de lo inédito. Yaquis de Ciudad Obregón y Cañeros de Los Mochis se vieron las caras por primera vez en su historia para disputar el cetro de la temporada 2002-2003.
Serie en donde sobró entusiasmo y la pasión. Los Yaquis sin un cetro desde 1980-81 mientras que Cañeros desde la 83-84.
Los Cañeros fueron marcados favoritos en razón de sus implacables actuaciones ante Hermosillo y Mazatlán, mostrando grandes virtudes en todos sus departamentos y particularmente en el pitcheo.
Los Yaquis llegaron tras dos series de las cuales salieron avantes "tintos en sangre", primero ante Culiacán y luego ante Mexicali.
Los Cañeros llegaron con el pitcheo a cargo de Victor Alvarez, Bronswell Patrick, Rafael Díaz y Juan Jesús Alvarez.
Ofensiva a cargo de Jason Bass, Saúl Soto, Matías Carrillo, James Lofton y Rontrez Johnson y Calvin Pickering.
¿El resultado final? Un muy merecido campeonato que le hizo bien y refrescó el ambiente competitivo de la Mexicana del Pacífico.
En el juego final, los Cañeros tuvieron que batallar en serio para por fin llamarse campeones. Un batazo de Ramón Orantes en la séptima entrada se convirtió en el batazo de la noche y del campeonato y que se queda como el momento en que se levantó el orgullo del cuadro Cañero.
Cañeros venció finalmente 4 juegos a 1 a los Yanquis, a quienes para hacerles justicia, habrá que decir que fueron muy dignos subcampeones del beisbol invernal mexicano.
Ya se ha dicho hasta el cansancio que el mes de Enero es "la otra temporada de la Mex-Pac" y que nada importa, cuenta o pesa lo hecho durante el rol regular. Los Cañeros ganaron los 12 juegos que son el requisito para ser monarcas, perdiendo solamente tres y pudiendo así conquistar por fin el tercer título de su historia y apenas el primero desde hace 19 años.
Gran mérito del manager Juan Francisco "Chico" Rodríguez, un roster muy bien armado, muchos peloteros claves y por supuesto, darle todo el reconocimiento al trabajo de la directiva que encabezaron el Lic. Mario López Valdez con Antonio Castro como su hombre de confianza. Todo el reconocimiento para la organización verde por este logro.
